"No se trata de hablar,
ni tampoco de callar:
se trata de abrir algo
entre la palabra y el silencio.
Quizá cuando transcurra todo,
también la palabra y el silencio,
quede esa zona abierta
como una esperanza hacia atrás.
Y tal vez ese signo invertido
constituya un toque de atención
para este mutismo ilimitado
donde palpablemente nos hundimos."
(Roberto Juarroz.)
Supongamos que el mundo es bonito; supongamos también que lo bonito merece ser mirado, mostrado, recordado; pongámonos solemnes y juremos que por algo bello iríamos a los extremos de lo insoportable y abominable, que nuestra garganta se desgarraría por cantarle -más bien por herir con nuestro penetrante clamor- precísamente al objeto bello que nos hace delirar y errar nuestra mirada al infinito ¿no estamos entonces añorando a chus, la bella, la de ingrávidos poemas, la lejana?
Escalera de Caracol es para mi un mundo de cristal donde entro de tanto en tanto a maravillarme de la belleza implacable de lo que ya no existe y hacer audibles los murmullos de su realidad especial, franca, tumultuosa en silencios íntimos.
2 comentarios:
Supongamos que el mundo es bonito; supongamos también que lo bonito merece ser mirado, mostrado, recordado; pongámonos solemnes y juremos que por algo bello iríamos a los extremos de lo insoportable y abominable, que nuestra garganta se desgarraría por cantarle -más bien por herir con nuestro penetrante clamor- precísamente al objeto bello que nos hace delirar y errar nuestra mirada al infinito ¿no estamos entonces añorando a chus, la bella, la de ingrávidos poemas, la lejana?
Escalera de Caracol es para mi un mundo de cristal donde entro de tanto en tanto a maravillarme de la belleza implacable de lo que ya no existe y hacer audibles los murmullos de su realidad especial, franca, tumultuosa en silencios íntimos.
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